Lágrimas... A veces
creo que las mías se han acabado.
Lágrimas que, creo,
se llevaron todos mi sentimientos; los resbalaron fuera de mi cuerpo hasta
estamparse contra el suelo, se fueron con el pañuelo que las enjugó o quizá
quedaron en al almohada o en el hombro de su jersey...
Lágrimas que se
perdieron y que, a veces, quisiera recuperar porque, a veces, quisiera volver
a llorar.
¿Dónde podría
conseguir más? ¿Alguien vende lágrimas? A veces daría cualquier cosa por volver
a llorar, volver a amar... Y pensar que las malgasté en tantas ocasiones...
Jamás pensé que
podría echar de menos llorar, que algo o alguien me importaran tanto como para
derrochar ese precioso tesoro.
Momentos:
Ven ¡acércate! y
haz que, con un gesto, te cuente todo; haz que te diga mi amor secreto, mi
mayor sueño, la clave de mi felicidad... Hazlo, y serás Tú.
Bésame ahora, y
hazme confesarte todo lo que siento por ti; haz que de mi boca broten las dos
palabras que tanto tiempo han esperado a la persona adecuada, recibe, por una
noche, todas las odas que mi cuerpo ha escrito, para ti.
Ven ¡acércate! Que
los momentos pasan y con ellos las oportunidades. Ven, y aprovéchate de que
ahora soy vulnerable a ti de nuevo, que me has vuelto a conseguir, que me creo
tus mentiras...
Acércate ahora,
porque no tardaré en ser consciente de mi misma y en volver a recordar que en
realidad no me quieres.
Dudo mucho que te vuelva a surgir una oportunidad así conmigo...
Así que... ¡Ven! Y luego... Ya se verá.
Leído y releído y no me canso, no me extraña que insistieras tanto, uno de los mejores, enhorabuena pequeña, me ha encantado y quizá hasta te lo robe para una contada, tiene un aire poético que me mola, y le iría a la Gitanjafora si acaso...Me gus!!!!!
ResponderEliminar